Gracias por estos 30 años de sacerdote

 Hoy, día de la Asunción de María, hace 30 años de mi ordenación sacerdotal.

Mi vida entera rota en torno a este acontecimiento que es parte del misterio de mi existencia. Por ello, hoy he abierto una botella de vino de Sariñena, cosecha de aquel mismo año, que alguien me regaló y la hemos bebido con mi familia. El vino estaba rancio, mejor para los postres, pero me sirve ahora para brindar aquí:

… por Don Javier Osés, mi obispo, que tan profunda huella dejó en mí y en la diócesis de Huesca.

…. por las comunidades cristianas a las que pude servir como sacerdote en activo, a las que llevo en mi corazón.

… por la gente sencilla y pobre a la que mi sacerdocio me ha acercado, que han sido mis grandes maestros.

… por las comunidades y grupos a los que pertenezco hoy, que me estimulan a seguir siendo un discípulo de Jesús.

… por quienes han sido capaces de abrirme puertas en estos años para poder seguir sirviendo al evangelio dentro de la Iglesia.

… por mis hermanos del Moceop, con quienes seguimos enarbolando la bandera de la libertad.

… por tantos sacerdotes secularizados, más de 120.000 en los últimos cincuenta años, sobre todo los que han sufrido más el desprecio, la ignominia o la pobreza.

… por mi esposa, Susana, y mis hijos, compañeros de camino, caricia de Dios, respuesta sorprendente a mis oraciones.

… por el Papa Francisco y los vientos nuevos que ha traído a la Iglesia, que nos hace desempolvar los sueños de un ministerio más evangélico.

En este día, te doy gracias, Señor, por este don de tu llamada, porque Tú nunca te desdices a pesar de nuestras incongruencias y pecados. Gracias por esta vocación especial que he recibido y que no entiendo muy bien algunos días, pero que espero que dé frutos de amor según tu voluntad.

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3 comentarios

  1. Maria Amparo Torres

    Juan, eres un gran esposo, un gran padre, un gran hijo y un buen cristiano, la pena es que no puedas ser todo eso siendo también un gran sacerdote, quedate con que hay muchísima gente que te queremos por todo eso que eres y que haces tan bien y tan a gusto, llevar el evangelio dia a dia a los demás y estar siempre para los que te necesitan, un abrazo muy fuerte para ti y tu familia

  2. Dios sabe qué escribe y con quién lo escribe.
    Lo difícil es decir como María “Hágase en mí, según tu Palabra”.
    Dichoso aquel que sigue sus pasos

  3. Al conocerte, Juan, a patir de lo que he visto y he sentido al convivir un día (!) contigo entiendo que, para entendernos, te pongas un pasado gramatical a “sacerdote en activo”, pero falla la gramàtica, porque eras y eres un sacerdote en activo. Eres un auténtico profeta, todo lo demás, incluso el culto, importa menos. Eres un vivo sacramento en activo, todo lo demás, lo pasivo, irá activándose poco a poco. No hay otra salida.

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