Silencio

 SILENCIO en la Plaza del Pilar con los niños saharauis que acogíamos, que acallaron aquella mañana sus gritos por un Sáhara libre para unirse al dolor de las víctimas de los atentados yihadistas de las Ramblas y de Cambrils. SILENCIO porque solo así descubrimos en nuestro interior que somos una sola familia humana, a pesar de todas las fronteras, creencias, culturas y lenguas que nos dividen si nos dejamos envenenar el alma. SILENCIO para acallar las voces de quienes siempre intentan sacar tajada del dolor, aún del dolor incomprensible del terrorismo. SILENCIO para no oír el aullido de la xenofobia y… Seguir leyendo…