¿Qué se le puede quitar a alguien que ya le has quitado todo? Pues, al parecer, siempre se puede hacer más pobre al pobre…
El Tribunal Supremo español acaba de fijar que los nacidos en el Sáhara Español antes de 1975, no tienen derecho a la nacionalidad. Ha obviado, sin embargo, que la dictadura otorgó al Sáhara la condición de provincia y que sus procuradores se sentaban en las Cortes franquistas. El último censo español, de 1974, determinó que en la colonia vivían 74.000 saharauis, cuyos descendientes pierden con esta sentencia el derecho a que les sea reconocida la nacionalidad española.
¿Qué eran entonces? ¿Qué son ahora los miles de saharauis que siguen encontrando en España un país que les acoge como a hermanos y hermanas?
Este verano, miles de niños no podrán dejar los campamentos de refugiados de Tinduf debido a la pandemia del coronavirus. Hagámosles, al menos, el regalo de protestar y conseguir que este despropósito creciente acabe. Logremos, de una vez por todas, que se celebre el referéndum de autodeterminación aprobado por la ONU hace más de cuarenta años y que Marruecos sigue vetando. ¡Sáhara libre ya!