Historia personal de salvación

El viernes 16 salimos de Kumbo, tras una semana dando el curso del diario personal, al que se apuntaron los niños a ratos, sobre todo cuando pintamos mandalas. Les gustó mucho a todos la sesión de relajación y meditación dirigida, así como escribir el diario siguiendo las dimensiones humanas. Pero, para mí, lo más bonito fue la eucaristía final, en la que dimos gracias por esos diarios al pie del altar en los que hemos garabateado algunas hojas pero que están mayormente para escribir nuestros futuros de búsqueda, de lucha, de camino por andar. Cuando Evaristus nos ha hecho entrega… Seguir leyendo…

El orfanato de Shisong

Pertenecemos a un grupo de familias escolapias llamado LAR. Con nuestro grupo hemos estado apoyando durante años al orfanato de Shisong, y hoy hemos tenido la alegría de venir a visitarlo con las postulantes calasancias y el P. Evaristus. La hermana Perpetua, que es la directora, nos ha atendido con mucho cariño. Las hermanas franciscanas (que también dirigen Sajocah) abrieron este hospital de Shisong (un barrio de Kumbo) hace unos ochenta años y, más tarde, entre otros servicios, abrieron un orfanato anexo. Aquí están muchos de los niños cuyas madres mueren en el hospital. En contraste con otros orfananatos, ellas… Seguir leyendo…

Un chiste en la iglesia

Mi  hija contó un chiste en la comunidad la noche que llegamos, y Evaristus, en misa, mientras predicaba sobre la confianza en los planes de Dios para nuestras vidas, le pidió que lo contara a toda la parroquia… Y allí salió ella a contar su chiste con todo el desparpajo: “Estaba Jesús un día y les dice a los apóstoles: – Hoy vamos a hacer penitencia. Que cada uno coja su piedra y suba a esa montaña. Pedro coge un gran pedrusco, y así la mayoría de los discípulos excepto Judas, que se echa una piedrecilla al bolsillo y empieza… Seguir leyendo…

Subiendo a Kumbo

Hemos venido a la comunidad escolapia de Kumbo, una ciudad a unos 100 kilómetros de Bamenda (dos horas y media de viaje en una carretera con algunas zonas muy malas de barro). El paisaje es precioso. La ciudad está a unos 1.800 metros de altitud, 500 más que Bamenda. Eso hace que tenga un clima muy fresco y sano con pocos mosquitos. Como estamos en plena estación de las lluvias, llueve todos los días. Seguir leyendo…